Las obras de Gaudí para los Güell

  • Finca Güell de Pedralbes, en 1913
  • Puerta enrejada de entrada a los pabellones de la Finca Güell de Pedralbes.
  • Iglesia de la Colònia Güell, el 1918.
  • Pabellón de la entrada del Parque Güell.
  • Entrada del Parque Güell
  • Entrada del Parque Güell
  • Columnas del viaducto del Parque Güell.
  • Parque Güell.
  • Parque Güell.
  • Chalet del Clot del Moro.
  • Pabellón de caza en la finca de Garraf.

La relación entre Antoni Gaudí y Eusebi Güell dio como fruto un conjunto de obras que el arquitecto realizó por encargo del mecenas.

Así, en 1883, Gaudí inició el proyecto de construcción de los pabellones de entrada de la finca Güell de Pedralbes. Posteriormente, en 1885, Güell encargó a Gaudí la construcción de su residencia en el centro de Barcelona: el Palau Güell, un edificio solemne y ostentoso en su interior, para cuya realización Gaudí utilizó materiales nobles, tales como mármoles, maderas y hierro forjado.

Güell realizó un nuevo encargo a Gaudí en 1898: la iglesia para la Colonia Güell, en Santa Coloma de Cervelló, de la cual sólo se llegó a construir la cripta. La construcción empezó diez años después de recibir el encargo, en 1908, y se prolongó hasta 1914.

En el año 1900 Güell realizó otro encargo: el Parque Güell. Se trataba de construir una ciudad-jardín en las afueras de Barcelona, con sesenta viviendas unifamiliares. A pesar de la modernidad del proyecto, fue un fracaso comercial que obligó a sus promotores a paralizarlo en 1914.

A principios del siglo xx, Gaudí también realizó por encargo de los Güell el Chalet del Catllaràs, destinado a vivienda de los técnicos que trabajaban en las minas del Catllaràs, de donde se extraía el carbón que después se transportaba a la fábrica de cemento Asland situada en Castellar de n’Hug, propiedad de los Güell.